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¿Qué es un blog y qué lo diferencia de una página web?



Un blog es un tipo de sitio web muy popular donde, a modo de revista, su autor (muchas veces un particular) publica periódicamente contenidos (llamados “posts”, “entradas” o “artículos”) a los que los lectores puedan añadir comentarios.

Si querías tener una definición rápida de lo que es un blog, la definición de arriba resume todo lo esencial. Pero debería saber que los blogs son mucho más que eso.

El concepto apareció por primera vez a mediados de los años noventa como una especie de bitácora personal que los autores usaban prácticamente como un diario íntimo expuesto al público en Internet.

Pero las cosas han evolucionado mucho desde entonces. Se ha descubierto, por ejemplo, que sirven como potentísimas herramientas de marketing digital, tanto que han supuesto una revolución en el mundo profesional por haber democratizado el acceso a los negocios en Internet.

¿Qué diferencia hay entre un blog y una página web?

Lo que debes tener claro es que un blog no es algo diferente como tal, es una página web más, pero con algunas características específicas, funcionalidades que son las que hacen de ella un blog propiamente dicho.

Estas funcionalidades vienen implementadas en aplicaciones web o plataformas (software que se instala en un servidor web) y servicios en la nube como Blogger o WordPress que, gracias a ello, hacen de la creación de blog algo bastante sencillo y rápido.

Pero, además, las más importante, Blogger y WordPress, son gratuitas, una razón fundamental en el tremendo éxito de estas plataformas. Tan sólo basadas en WordPress (el líder) se tiene constancia de, al menos, unos 25 millones de sitios web en este momento.

Además, estas plataformas no sirven exclusivamente para crear blogs, sirven para prácticamente cualquier web de complejidad baja o mediana. Tanto es así que existen incluso grandes marcas como Sony o Walt Disney cuyas webs están basadas en WordPress.

¿Qué es entonces lo que hace de un blog un blog?

Publicación periódica

Los blogs publican contenido de una manera periódica, similar a una revista tradicional que publica nuevos números cada X tiempo. Los blogs intentan ser rigurosos con ello publicando con una periodicidad fija de, típicamente, una o varias veces por semana.

Las plataformas para blogs incluyen una funcionalidad de feed que permite que con lectores de feeds como, por ejemplo, Feedly, que los lectores, de un solo vistazo, puedan estar fácilmente al tanto de las novedades en todos los blogs que siguen.

Interacción con los lectores y comunidad

Los blogs fueron de las primeras webs, sino las primeras que, a través de los comentarios, introdujeron la posibilidad de interactuar de manera directa con el autor y otros lectores.

Eso produjo una sensación de cercanía entre ellos y con ello una experiencia antes desconocida para los lectores que ha sido muy exitosa y ha inspirado la web 2.0. Fue la base para desarrollar ideas basadas en ese concepto como, por ejemplo, las redes sociales.

Por otra parte, forjo el concepto de comunidad web, un grupo de personas que siguen el blog en cuestión formando la comunidad de seguidores con una identidad de grupo que se articula en torno a los intereses comunes reflejados en la temática del blog, etc.

Hoy en día este tipo de comunidades se forman del mismo modo en torno a canales de YouTube o los “influencers” en redes sociales.

Marcado toque informal y personal

Dentro de ese espíritu de buscar la cercanía con los seguidores también resulta lógica un trato más informal con los lectores. Eso se refleja, por ejemplo, en que la norma es hablarles de “tú” a tus lectores.

En buen blog, en definitiva, debería buscar siempre un ambiente parecido al que hay entre un grupo de amigos. Tanto es así que, incluso muchos de los blogs corporativos bien hechos también mantienen ese estilo de comunicación en sus blogs.

Los posts (entradas) y páginas de los blogs

Junto con los blogs se introdujo también el concepto de “post” que luego se ha llevado también a otros ámbitos como, por ejemplo, las redes sociales.

Un post, entrada o artículo es el contenido por excelencia en un blog, son las páginas de nuevo contenido que un blog va publicando periódicamente cada X tiempo. Todos los blogs cuenta con una página con un listado de sus posts.

En este sentido, se ha aplicado el mismo término también a otros ámbitos. Un “post” en Facebook, por ejemplo, sería una nueva publicación en Facebook.

Sin embargo, cuando se habla de “páginas” en un blog, aunque técnicamente son lo mismo que un post, va implícita la noción de contenido estático, es decir, contenido que no varía o varían muy poco en el tiempo.

Ejemplos de esto serían páginas de productos y servicios o páginas como “Acerca de”, “Aviso legal” o “Contacto”. Estas páginas articulan la estructura básica del sitio. Mientras que los posts son ese “reguero” de nuevos contenidos que hace de un blog un sitio fresco y dinámico.

Organización del contenido por categorías y etiquetas

Un último punto muy característico de los blogs es la organización de sus contenidos por categorías y etiquetas.

Es normal que un blog, al cabo de unos años, acumule cientos de posts. Semejante cantidad de contenidos necesita algo de organización que es para lo que se han inventado las categorías y las etiquetas en los blogs.

Las categorías con una división de grano grueso de los contenidos que debe ser coherente con la temática. Lo suyo es que sean pocas categorías, como norma general, no más de diez, menos al ser posible.

Qué tipos de blogs existen y cuáles son sus características

Blog personal

Los blogs personales son eso: personales. Son blogs en los que el autor habla de los temas que le interesan, experiencia, su día a día, temas políticos y de otras inquietudes personales, etc.

Los primeros blogs eran prácticamente todos personales porque el propio concepto de blog se concebía así entonces, una especie de diario íntimo abierto al público.

Mi recomendación aquí es que si volcar este tipo de contenidos en público realmente te satisface y motiva para realizar el trabajo diario que conlleva un blog, bien, pero ten en cuenta que, salvo que seas ya un personaje famoso, estos blogs lo tienen complicado para conseguir éxito.

La razón de esto es que este tipo de blogs tienen muy poco potencial para conseguir un público grande (que es lo que te permite hacer cosas “potentes”), al fin y al cabo, si no eres una persona conocida, habrá poca gente a la que le interesa tu vida. Es algo frío decirlo así, pero así es.

Blog profesional y de marca personal

Con el tiempo, los bloggers se empezaron a dar cuenta de una cosa que es, en realidad, es sentido común básico: conseguían mucho más éxito con contenidos que interesaban a los demás que con contenidos centrados en su propia persona.

Pero, además, descubrieron que todo esto conllevaba un “efecto secundario” muy positivo y muy potente: publicar contenido útil sobre una determinada temática le generaba reputación al autor de ese contenido en esa materia.

Así es cómo se descubrieron los blogs como la herramienta ideal para crear una marca personal sólida, en menos tiempo y con menos esfuerzo que por vías tradicionales (ponencias, edición de libros, etc.):

¿Qué es eso de la “marca personal”?

En una situación de exceso de profesionales es vital diferenciarse para sobrevivir, crear una marca personal es la mejor manera de hacerlo.

Aplicado todo esto a temáticas relacionados con tu profesión o tu negocio, el blog se convierte en una excelente herramienta profesional para promocionar tu carrera, mejorar tu empleabilidad o apoyar a tu negocio.

Blogs de empresa

Como no podría ser de otra manera, las empresas se percataron de lo que estaba pasando con los blogs y querían también su “trocito del pastel”. Así que empezaron a surgir secciones de blog en las webs corporativas como setas.

Pero muchas empresas, diría que la mayoría, lo hicieron realmente mal: ponían un blog, con un esfuerzo mínimo, contenidos triviales que no aportan valor y muchas veces actualizado tan solo de Pascuas a Ramos.

Esto refleja perfectamente lo que pasa tantas veces en los entornos corporativos ven un fenómeno, van a explotarlo, pero lo hacen rápido, superficial y sin entender “de qué va” realmente. El resultado: un montón de blogs corporativos que no le interesan a nadie.

Mi recomendación: si tienes una empresa, que sepas que un blog en una web de empresa bien lleva, funciona. Pero igual que en el caso de los autores individuales, hay que llevarlo con cariño, esforzándose en aportar valor en los contenidos, cuidando la relación con los lectores y mantener una disciplina total en la periodicidad de las publicaciones.

Blogs y webs de nicho

Una última variante que mucha gente ha descubierto como una oportunidad para un pequeño negocio son las webs de nicho, webs que muchas veces son blogs o están montadas con plataformas de blogs.

Podríamos estar hablando, dentro de mundo salud y fitness, en un blog de yoga, por ejemplo, o, dentro del mundo de la jardinería, por ejemplo, en un blog especializado en el mundo bonsái.

Este tipo de sitios tienen la ventaja de que pueden competir en Google con sitios mucho más grandes en búsquedas muy especializadas (que los sitios grandes suelen descuidar) y conseguir visibilidad para estas búsquedas.

Esto es algo que en el posicionamiento web se conoce como la “larga cola” (“long tail” en inglés).

A partir de esta visibilidad, hay muchas fórmulas para hacer de este tipo de sitios una fuente de ingresos, desde fórmulas de ingresos pasivas como el marketing de afiliación hasta fórmulas tradicionales como la prestación de servicios profesionales.

Fuente Cuidadano 2.0

Con tecnología de Blogger.